La Sociedad Teosófica y los Nationalist Clubs

En el Mando nº 23 Jorge Livraga hace mención a una carta de HPB para la Convención Americana de abril de 1890, en la que habla sobre los "Movimientos Nacionalistas". 

Jorge Livraga explica que de la Sociedad Teosófica derivaron dos ramas: La Iglesia Católico Liberal y la Rama Dorada. La primera la define como el ala izquierda (modernista de las Enseñanzas) y la segunda como el ala derecha (de carácter político). Según Livraga, de esta “Rama Dorada” política, derivaron los "Movimientos Nacionalistas", los cuales influenciarían a la Sociedad Thule, la cual, según él, daría impulso y justificación al nazismo. Lo que se sabe de la Sociedad Thule es que fue un Grupo de Estudio de la Antigüedad Alemana fundado por Rudolf von Sebottendorff. masón y estudioso de la teosofía que patrocinó al Partido Obrero Alemán (DAP), más tarde transformado por Adolf Hitler en el Partido Nacionalsocialista Alemán de los Trabajadores (NSDAP). No entraremos mucho más en este tema, porque lo que es interesante es lo que comenta HPB sobre sobre los Movimientos Nacionalistas. 

En la carta para la Convención Americana de abril de 1890, HPB menciona los "Movimientos Nacionalistas" como una aplicación de la Teosofía. Si nos vamos al libro "La clave de la Teosofía", HPB vuelve a hablar de ello, haciendo mención a los "Nationalist Clubs" fundados por Edward Bellamy, de los cuales derivaron otros muchos que estaban gestionados en gran parte por teósofos y masones. Fue precisamente Francis Bellamy, primo de Edward, quien inventó y popularizó en EEUU el "saludo Bellamy" (saludo con el brazo en alto) y el juramento a la bandera, además de otras formas que tuvieron que eliminarse como consecuencia de la Segunda Guerra Mundial por lo mal vistas que empezaron a ser.

HPB sigue mencionando que el libro de Edward Bellamy titulado "Looking Backward" representa de manera admirable la idea Teosófica de fraternidad. 

"La organización de la sociedad descrita por Eduardo Bellamy en su magnífica obra Looking Backwards (Mirando atrás), representa admirablemente la idea teosófica respecto a cuál habría de ser el primer gran paso hacia la completa realización de la fraternidad universal. (HPB. Clave de la Teosofía). 

En este libro, Bellamy describe una sociedad "utópica" que la describe como un "ejército industrial". Destacamos el capítulo XII en donde, entre otras cosas, describe las pequeñas condecoraciones de metal, plata y oro que tendrá la gente según sus méritos. Curioso ¿verdad?. Y si tenemos en cuenta la gran admiración que Jorge A. Livraga tenía por HPB, es de suponer que haya tenido en cuenta las opiniones que ella tuvo sobre la implantación a nivel político de la Teosofía. 

Aun así, esto no justifica la gran cantidad de  símbolos fascistas y nazis que utiliza NA, porque por mucho que la Sociedad Thule se haya influenciado por estos "movimientos nacionalistas" de los cuales HPB habla tan bien, Jorge A. Livraga afirma que la Sociedad Thule ya estaba desvirtuada en sus inicios. Además, los movimientos nacionalistas, por mucho que hayan influenciado a la Sociedad Thule, nunca utilizaron sus símbolos ni uniformes. Así que cada uno saque sus  propias conclusiones...

1 comentario:

  1. Es interesante todo lo que has puesto, y yo he notado algo sobre el tema del nacionalismo en nueva acrópolis: no les interesa. No se si es bueno o malo, pero me parece que las razones por las cuales no fomentan el conocimiento de las culturas locales es porque ellos necesitan incrementar la admiración por las culturas de las cuales se supone, extraen el conocimiento esotérico, especialmente Egipto, Grecia y Roma. Y me da la impresión que por eso, las demostraciones de amor a lo nacional, exagerado o no, no les vienen bien. Son muy hipócritas en este punto, porque celebran las fiestas cívicas solo por aparentar, pero ni los dirigentes ni los instructores se ocupan de profundizar en los valores cívicos. Por otro lado, la verdad es que los nacionalismos extremos tampoco son siempre buenos, y a veces sirven para justificar violencia, etc., pero en este caso más bien es falta de interés y cultura general, porque hay que poner lo "clásico" por encima de lo demás. No se si también tendrá que ver conque los directores nacionales suelen ser gente extranjera que tiene poco o nulo arraigo por los países donde fundan sus filiales, así que no hay por donde. Hoy que lo pienso, Jal no parecía sentirse muy orgulloso de su origen argentino, al menos en sus escritos, y antes que nada te recalcan su origen "italiano", como si lo más admirable fuera lo europeo antes que lo latinoamericano. Mira a Delia, ha perdido totalmente su forma de hablar nativa. ¿Será que le da pena?

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